miércoles, 2 de mayo de 2007

Retazos de surrealismo


Malasaña se ha convertido esta madrugada, por segunda noche consecutiva, en una zona de guerra. […] En la calle de Fuencarral, cerca de Tribunal, un grupo de policías nacionales ha arrinconado a tres veinteañeros que se iban hacia Gran Vía y les han propinado varios porrazos. El peor parado ha sido un chico al que le han abierto un corte en la cabeza que sangraba abundantemente. Se ha quejado a gritos pero sus compañeros han tenido que llevárselo a la fuerza porque se acercaban los agentes. […] Un agente municipal con un casco de motociclista blanco bloqueaba el paso a Tribunal, desde San Vicente Ferrer, a varios adolescentes. Les aconsejaba que dieran media vuelta si no querían atenerse a las consecuencias. Una chica le ha respondido: "No he hecho nada para llevarme palos". El policía ha solucionado la cuestión con un: "Me cago en tu puta vieja". […] Otro municipal se encara con una chica que sale de un bar porque lleva una cerveza en la mano. La aludida no entiende por qué tiene que tirar su copa. "Tranquilo, hombre", intenta ella. "Me da su consumición, por favor", le pide él, con una solicitud exagerada. La chica cede, el policía coge la copa, se gira y la arroja al suelo. […] En la calle de La Palma, una pareja de adolescentes llora porque el chico ha recibido varios porrazos y la chica ha perdido a los amigos entre el jaleo. "¿Dónde estás, tío?", grita él con angustia por el móvil. De repente, alguien alerta de que se acerca la poli, y los presentes, la pareja y todos los noctámbulos a la vista, se apelotonan a trompicones en la puerta de un pequeño local, en La Palma, cercano al contenedor cruzado. "Esto parece Vietnam", comenta alguien con sorna. […] Uno de los últimos agredidos, hacia las cinco de la madrugada, ha sido Carlos, de 27 años, que explica que trabaja en la Comunidad de Madrid y que se ha llevado un corte en la frente, un labio hinchado y varias contusiones por preguntar a los agentes que por qué increpaban a unos jóvenes. Mientras lo esposaban, varios periodistas se han acercado para saber qué estaba sucediendo. Los policías se han encarado con ellos, les han ordenado que se fueran y les han espetado: "¡A ver qué vais a escribir!". […] El sonido de las pelotas de goma martilleaba de fondo mientras los furgones de la policía nacional recorrían las calles de San Bernardo y Fuencarral, que flanquean el barrio de Malasaña. Una de las pelotas que ha recogido una chica mostraba la frase "Uy, perdón", escrita con bolígrafo. […] Los agentes corrían en grupos de unos quince y parecían desorientados. Tan pronto avanzaban calle de San Vicente Ferrer abajo, hacia San Bernardo, como volvían a la carrera sobre sus pasos al grito de "¡Al Dos de mayo!". Una de esas cargas policiales aleatorias ha irrumpido en la calle de Fuencarral hacia las 4.15 de la mañana. Varios viandantes han resultado heridos, entre ellos un hombre que sangraba abundantemente por la cara y al que ha atendido una unidad del Samur. El herido ha señalado que los agentes le han agredido cuando les ha preguntado que por qué gritaban a unos chicos. "Se me han echado encima, me han tirado al suelo y me han esposado", ha añadido, con el labio superior hinchado y un vendaje en la frente. [...] "Estaban exaltadísimos (los agentes de Policía), muy nerviosos, han cargado contra todos", ha asegurado otro de los jóvenes que se ha visto inmerso en los enfrentamientos.

3 comentarios:

Anonymous Anónimo ha dicho...

Gus, si me permites, voy a darte mi opinión respecto al tema de la batalla campal del 2 de mayo, aunque ya te advierto que no vas a estar muy de acuerdo. Espero que después de leerlo me sigas teniendo cariño, jajaja.
Sé que siempre que hay un enfrentamiento violento entre jóvenes y policía (y más con un gobierno del PP tanto en la Comunidad como en el Ayuntamiento) se revive con bastante facilidad, que no justificación, el manido mito de los grises y de las ostias que repartían a diestro y siniestro cuando se terciaba porque a la autoridad de Francisco no se le subía nadie a las barbas. Esa es la imagen que se me ha venido a la cabeza según leía el relato de los hechos que has colgado.
Sin embargo, creo que es un error dejarnos siempre llevar por los mismos tópicos, una inercia que lo único que viene a demostrar es nuestro afán por ratificar nuestro pensamiento unidireccional y nuestra cortedad de miras. Me hace gracia el matiz que da el autor al reportaje cuando habla de los chicos perseguidos por la policía. “El herido ha señalado que los agentes le han agredido cuando les ha preguntado que por qué gritaban a unos chicos”, reza el texto. “A unos chicos”, me quedo con esa expresión. Me llama la atención lo prolijo que ha sido el autor en la descripción de los policías, plasmando con el máximo rigor su actitud violenta y la agresividad de sus órdenes. Pues no me creo que los chicos fueran solo eso, chicos. Creo que ahí la historia ha sido poco concisa.
Tú y yo Gustavo sabemos lo que es hacer botellón en Tribunal, y lo que es mear en los edificios colindantes. ¿Te acuerdas del hedor? Entonces nos sudaba la polla, porque, total, allí no vivíamos, sólo íbamos los viernes con los colegas y nos lo pasábamos bien, muy bien. Después he visto en reportajes en la tele cómo los vecinos se quejan y, con razón, de los escándalos que se montan en esa zona. Seamos razonables, ni a ti ni a mi nos gustaría salir una mañana y tener nuestro portal lleno de botellas o vómitos, ni que el bullicio de la calle no nos dejara dormir los fines de semana.
Pero, en fin, aparte de eso, estoy seguro de que si mientras tomábamos el botellón en el parque de Tribunal hubieran venido los polis cargando hubiéramos echado patas como el que más, y si nos llega a pillar una pelota de goma, pues a rascarse el culo. Sin embargo, no te veo capaz a ti, ni a mí, ni a ninguno de los que nos juntábamos de lanzar ladrillos y piedras a la policía. Eso de ser un bandarra y un inconsciente por jugarte algo más que una detención si matas a alguien. Voy más allá, eso es de ser un hijo puta.
Los polis van a currar igual que tu y que yo. Y si desde la unidad les dicen que hay jaleo en el 2 de mayo, te aseguro que gracia no les hace, porque saben que se pueden ganar una pedrada o un botellazo o algo peor porque hay mucho cafre suelto.
Tengo un amigo que es policía, votante del PSOE, por cierto. Te aseguro que si él algún día da ostias con la porra no es porque las directrices de la derecha gobernante le han sorbido el seso. Él me lo dice: “Mi compañero es más agresivo que yo y rápidamente saca la porra cuando se pone nervioso”. Quiero decirte que son tíos como tú y como yo y que tratan de evitarse problemas con descerebrados, porque cuando llegan a casa está su familia, tienen sus colegas y son gente normal que pasa de movidas (siempre habrá excepciones). Y son polis porque les ha dado por ganarse la vida de esa manera, porque son funcionarios, ganan pasta, y libran dos meses y medio al año. A mi me parecen unas razones bastante convincentes.
Eso si, si la ley dice que no se puede beber en la calle ellos tienen que cumplir con su trabajo y desalojar la plaza que sea, si tienen que utilizar la fuerza, mal asunto, fijo que preferirían dar cuatro voces y todos contentos. Pero hay gente que no lo admite y ya está liada. Y ese es el problema, no hay más. Si tú en tu clase estas enseñando y uno de los chavales se dedica a pasar de lo que dices y distrae a los compañeros, seguro que empleas alguna medida coercitiva: o le cateas para que espabile o le apercibes o lo que te ingenies para que ese chaval cambie. Naturalmente que la proporción del castigo es distinta, al igual que el motivo que produce la alteración de la convivencia del grupo (en un caso perjudicando a los vecinos y en el otro, a los alumnos que atienden). Está claro que habrá polis hijos de puta que hagan un uso indebido de su poder, pero también hay profes cabrones que les gusta putear. Depende del compromiso y la honestidad de cada uno.
Y ya termino que fijo que te estoy aburriendo. Con este rollo te quiero decir que hay que relativizar las cosas y mandar a tomar por culo la concepción maniquea con que vemos la vida. Y dejar de lado el pensamiento monolítico. Y que si no se está de acuerdo con una ley se puede protestar de muchas maneras, de forma civilizada, lo primero. Pero no, siempre hay gente radical que la arma. Justificarles y darles un barniz de heroísmo y legitimidad me parece una injusticia descabellada.

4 de mayo de 2007, 17:19  
Blogger Gustavo ha dicho...

Vale, muy bien argumentado, pero hay algunas trampas. Evidentemente, estoy de acuerdo con casi todo lo que dices; lo de mear en los portales y demás; hay claramente un problema de convivencia, para el que se pueden establecer diversas soluciones. Pero ten en cuenta que estos hechos han ocurrido el 1 y 2 de mayo, fechas en las que tienen lugar tradicionalmente fiestas populares en esa Plaza, que este año (casualidad: hay elecciones en dos semanas) han sido prohibidas. ¿Por qué se prohiben unas fiestas populares? Lo que ha ocurrido ha sido un acto electoral del señor Gallardón, planificado paso a paso por parte de los técnicos de marketing que diseñan su campaña electoral, y que le va a dar, una vez inaugurada la M-30, los últimos votos necesarios para repetir mayoría absoluta. Los fragmentos que he puesto aquí los he sacado de El País, donde lógicamente saben muy bien lo que hacen; pero todos ellos me parecen perfectamente verosímiles, porque yo también he vivido alguna manfiestación. Hay algo perfectamente poético en el hecho de que una chica salga de un bar con una cerveza en la mano y sea amenazada por un antidisturbios; en que unos chavales estén bebiendo, en fiestas, rodeados de policías, dispuestos a cargar contra ellos. Sí, por otra parte, habrá policías que sean buena gente; y probablemente en este tipo de situaciones estén más acojonados que los propios chavales que corren delante. Pero no hay derecho a que apaleen a todo el mundo a su paso, a gente que no tiene que ver con nada, a gente que está quieta, en suelo, heridos... Estos señores consumen cocaína en las furgonetas de la policía (esto es algo sabido) y salen a por todas. Y finalmente, no entiendo por qué Madrid de pronto es una ciudad donde es imposible encontrar un bar abierto a las tres de la madrugada. Y otra cosa: los botellones se celebran TODOS LOS FINES DE SEMANA; ¿por qué ha sido el despliegue de las fuerzas del "orden" en estos días? Lo dicho, un acto electoral de ese ser vomitivo llamado Gallardón (es mucho peor que Esperanza Aguirre este tipo, ojo).

5 de mayo de 2007, 8:16  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Gallardón no es gilipollas, por supuesto que no. Que puede formar parte de su capaña electoral... pues no se, tal vez. Sin embargo, no creo que Gallardón vaya a conseguir la mayoría por lo del fin de semana.
También te digo que lo de los botellones en Madrid hace bastante que no son lo que eran y que hay que tener ojo de que no te vea la poli bebiendo en la calle porque te empapelan, no solo el puente pasado, sino de unos años a esta parte.
Lo que dices de la coca de que si los polis se la tomaran como si fueran Asterix, pues habrá unos que sí, habrá otros que no. Mi amigo no consume y otros dos chicos que conozco tampoco. Es que además son buena gente. No puedo hablar por el resto, pero les puedo preguntar, que seguro que si es verdad me lo dirán.
Es cierto que si te pilla una carga policial date por jodido porque no distinguen. Pero eso no es de ahora. Me acuerdo hace unos años, cuando ganó una de las copas de Europa el Madrid que fui a Cibeles y cargaron, y no me vi en medio del follón de milagro. Pero es que la policía carga así aquí y en cualquier otro sitio.
Y por cierto, sí que hay bares en Madrid que cierren más tarde de las tres. Te clavan, pero los hay.

5 de mayo de 2007, 21:35  

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