LITERATURA Y CARNET DE CONDUCIR
Definitivamente, no se debe escribir una novela mientras se estudia el libro de la autoescuela. Puede haber influencias o contaminaciones indeseadas. Si no, véase el título: “Un alma sin remolque”.
Y qué decir del siguiente diálogo folletinesco-autoescuelístico:
-No, no te merezco –dijo ella-. Mi vida no tiene luces indicadoras de dirección. Y tú… Tú eres tan bueno. Tienes un corazón tan grande.
-No rebaso la masa máxima autorizada –dijo Gálibo, que así se llamaba él.
-Pero estás muy cerca.
Entonces, Gálibo la cogió muy fuerte entre sus brazos, y le dijo:
-Tu vida necesita un cambio de rasante.
Y la besó. Y la visibilidad se redujo a negro.
0 comentarios:
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio